domingo, 25 de noviembre de 2012

EL VIAJE DEFINITIVO

Una de las mayores cuestiones que creo que todos tenemos en la vida, como voy a morir? y si muero a donde voy?
Este poema me encanta por que refleja no el miedo de a donde ir ni que pasara después, si no la mera nostalgia de dejar cosas tan simples en la vida, tan cercanas a uno, como el lugar donde nacimos cosas que vemos diariamente como algo normal pero que no apreciamos, cuando menciona las campanas, es... como cuando se acerca la navidad y me acerco a oler los pinos naturales en las tiendas, y me remonta a mi infancia la navidad en casa en familia, así creo que el recuerda algo muy personal al escuchar las campanas del campanario, aromas, sonidos, colores, olores que nos atan a esta tierra... a esta vida, la vida misma deja parte de nosotros aquí.




Y yo me iré. Y se quedarán los pájaros cantando;
y se quedará mi huerto con su verde árbol, y con su pozo blanco.
Todas las tardes el cielo será azul y plácido; 
y tocarán, como esta tarde están tocando, 
las campanas del campanario. 
Se morirán aquellos que me amaron; 
y el pueblo se hará nuevo cada año; 
y en el rincón de aquel mi huerto florido y encalado, 
mi espíritu errará, nostálgico. 
Y yo me iré; y estaré solo, sin hogar,
sin árbol 
verde, sin pozo blanco, 
sin cielo azul y plácido... 
Y se quedarán los pájaros cantando. 


-Juan Ramón Jimenez